Una noche emotiva, entrañable, emocionante, sorprendente… Con estos adjetivos podríamos describir el homenaje que rindió Villaviciosa de Odón a una de las divas de la ópera, Teresa Berganza, para conmemorar el décimo aniversario del Coliseo de la Cultura. Durante algo más de dos horas, familiares y amigos subieron al escenario del auditorio que lleva su nombre para hacer un recorrido por la extensa carrera operística de “la voz”. Antes del comienzo del espectáculo, el alcalde, José Jover, acompañado de la concejala de Cultura, Sonsoles Porras, dio la bienvenida a Berganza y señaló que “es un lujo y un placer contar con una artista de tan alto nivel para celebrar los 10 años del epicentro de la cultura villaodonense, nuestro Coliseo”. Por otro lado, el primer edil apuntó que Teresa Berganza siempre estará “en los corazones de todos nosotros, no sólo por su calidad artística, si no también, por su gran calidad humana”.
Al término del homenaje, la hija de Teresa Berganza, la soprano, Cecilia Lavilla, invitó a su madre a subir al escenario para juntas deleitar con sus espectaculares voces a un entregado auditorio. Entre lágrimas, Teresa Berganza agradeció a los presentes todo lo acontecido durante la noche y aseguró que “nunca podré olvidar este día ni a Villaviciosa de Odón”.
RECONOCIDA NACIONAL E INTERNACIONALMENTE
Teresa Berganza, mezzosoprano española, nació en Madrid y se formó en diversos estudios de música. Se inició con Mozart y Rossini que con el tiempo se convertirían en sus máximos referentes, junto a la Carmen de Bizet. Su debut oficial fue en el Ateneo de Madrid en 1957, en los que interpretó el ciclo de Schumann Amor y vida de mujer. Von Karajan la dirigió en Viena en 1959 en Las bodas de Fígaro, cantó en la Lyric Ópera de Chicago en 1962 y Nueva York se rindió a sus pies en el Carnegie Hall ese mismo año. Sin olvidar uno de los acontecimientos más llamativos en 1977 en el Festival de Edimburgo junto a Plácido Domingo, entre otros.
